Viriax

Viriax es un arcade de corte clásico en el que nuestro objetivo será ascender lo máximo posible eliminando células infecciosas a lo largo de una serie de niveles que representan diferentes secciones del cuerpo humano.

Comenzaremos purificando el corazón, los pulmones o los intestinos, pero a medida que vayamos mejorando nuestras puntuaciones conseguiremos desbloquear más y más fases para un total de doce enfermizos niveles que seguro consiguen sacarnos de nuestras casillas.

Y es que pese a que la mecánica es muy divertida y francamente intuitiva, el elemento más significativo de Viriax es su enorme dificultad. El motivo es que para movernos necesitaremos usar resistencia (la barra de vida), por lo que tendremos que medir muy bien cuando merece la pena atacar a un enemigo y cuando es inteligente seguir hacia arriba. Claro que todo esto da igual si alguno de los jefazos nos destroza en unos segundos... que también es posible.

El apartado visual del juego continúa la línea de Locomalito, con un estilo pixelado encantador que hará las delicias de los que comenzamos a jugar entre los ochenta y los noventa. No obstante, los gráficos son lo de menos cuando estamos escuchando una banda sonora tan genial como la que propone Gryzor87, el compositor habitual en los trabajos de Locomalito.

Viriax es un título excelente que, si bien peca de ser excesivamente difícil, consigue enganchar una barbaridad gracias a su adictiva mecánica.